Hola! Soy Josefina Gandino, tengo 33 años y soy de Intendente Alvear, La Pampa. Soy maestra y mamá de 3!
Hace aproximadamente 8 meses empezamos a recorrer la provincia de La Pampa junto a mi hija de 15 años y mis hijos de 9 y 6 años.
Motivos?
Muchos!!! Pero principalmente la idea es que los chicos conozcan su provincia, sus paisajes pero, sobre todas las cosas… su gente.
Recorrimos más de 1000 km y conocimos mas de 15 pueblos de la provincia. Todos diferentes, cada uno con diversas características.
El primer viaje que hicimos fue a Relmo, donde conocimos a un gran escultor provincial, realiza esculturas con madera de árboles secos, deteriorados: Ricardo Oscar Vivas, conocido por su seudónimo de Ruca Huitrú que significa Casa del Caldén. Durante ese viaje en Quemú Quemú me había quedado sin agua para el mate y fuimos a la comisaría a calentar el agua que había comprado y mis hijos no entendían porqué… les expliqué que cuando alguien no tiene los medios, puede ir a un lugar público a pedir ayuda.
La Adela nos impactó por su belleza, bardas, mirador… lindo lugar para pasar unos días.
Pichi Huinca es hermoso, pujante… la gente de ahí nos enseñó que los sueños se cumplen cuando se trabaja en equipo. Aquí los medanos de lobocó donde se formaron ojos de agua, es precioso!
Las visitas a Abramo y Bernasconi nos dejaron la gran enseñanza de que, sin conocernos, nos ayudamos y acompañamos. La anécdota aquí fue que me había quedado sin agua para el mate y compre una botella de agua y fuimos a la comisaría, mis hijos no entendían porqué, les dije que cuando alguien no tien los recursos puede assitir o pedir ayuda en un lugar público.
Las huellas perdidas de Mariano Miró y su historia, quedarán guardadas por siempre en nuestro corazón.
El museo de Neldo Giorgi en Hilario Lagos... imperdible!
Ingeniero Foster donde nos contaron que supo haber varios aserraderos y que hoy lamentablemente ya no funcionan.
Caleufú con su bello parque acuático al lado de la estación de ferrocarril.
Las lomas de Vilchez entre Hilario Lagos y Adolfo Van Praet, son unos médanos con un ojo de agua, aunque es un lugar privado, pudimos verlo.
Sabemos que nos falta mucho por recorrer, conocer y experimentar… lo haremos! Como siempre… en familia, en equipo.
